GUERRA

 

Cañonazos estruendosos,
bombas de sangre y de fuego
martillean nuestros valles,
montañas, campos y pueblos.

Es la guerra ... En lontananza
densas nubes de humo negro
enlutan el horizonte
y recubren los senderos.

Ascuas vivas centelleantes
siembran de luces el suelo,
mártires flores renacen
cubiertas de sombra y duelo.

Aquí yacen hombres pálidos
con sabia roja en el pecho,
sus manos abiertas rígidas,
sus ojos miran el cielo.

Allí, mujeres y niños
con lívidos rostros yertos
pregonan con voces mudas
su inocencia al mundo entero.

Más allá, gritos horribles
- campanas tocando a muerto -
se elevan como saetas
cortando alas al viento ...

Otra vez relampaguean
los sangrientos bombardeos ...
nuevas víctimas abrazan
para siempre el campo austero.

Arroyos de sangre ardiente
tiñen de grana el terreno;
torrentes de claras lágrimas
riegan los surcos sedientos.

No hay arcos iris que vengan
a anunciar acuerdos nuevos,
ni palomas que transporten
unas palabras de aliento.

Todo son ruínas y escombros,
todo luto y desconsuelo...
El sol recoge sus rayos
y extiende sus grises velos.

¡ GUERRA !, madre de desdichas
de dolor y de destierros.
¿ por qué desprecias la vida ?
¿ de qué te sirven los muertos ?

Angel GUTIERREZ

 

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